El frío cala en los huesos de más de 300 familias en los barrios populares. Jóvenes reciben mantas, frazadas y ropa para que lleguen a quienes les hace falta. Además, decidieron arreglar la plaza de la zona entre todos
Un grupo de jóvenes se reúne y organiza para ayudar a otros. Es una situación que ante la crisis, persiste y genera en otras generaciones la esperanza de un cambio.
En Paraná, son cientos de personas las que sufren frío y hambre. Y son decenas los que generan lazos solidarios.
“Que la comunidad abrigue” es una campaña llevada adelante por estudiantes universitarios de la ciudad. En diálogo con El Telégrafo de Entre Ríos, explicaron que consta en recolectar donaciones de abrigos, frazadas y mantas, “ya que en estos momentos de vulnerabilidad y grandes fríos, decidimos activar las redes de solidaridad y convocar a la comunidad a dar una mano. Se viene un invierno muy frío y hay gente que no puede ni tiene abrigos”.

Ante la consulta sobre la motivación de comenzar la campaña, detallaron: “Nosotros militamos en los barrios y la gente pasa mucho frío en estas épocas ya que sus casas tampoco están en buenas condiciones (tienen techo de chapa y toldos). La campaña nace del encuentro con la realidad de los barrios populares de la ciudad. El Estado no está ni para asegurar una vivienda digna, un plato de comida y mucho menos pensar en abrigo. No hay ningún tipo de contención social para la terrible situación que estamos atravesando como sociedad”.
En este sentido, aseveraron: “Nosotros denunciamos el abandono del Estado mientras nos organizamos y convocamos a la comunidad a esta campaña a fin de poder dar una solución, un parche en la situación, porque quien puede y debe solucionarlo es el Estado”
Desde la organización estiman que más de 300 familias sufren las bajas temperaturas y las lluvias en los barrios de Paraná. “Nuestro objetivo es juntar lo más posible, intentando anticiparnos a las fechas más heladas para alcanzar a las familias y llenar los roperos solidarios de las vecinales y merenderos que acompañamos. Las donaciones se pueden acercar a la Facultad de Trabajo Social de la Universidad Nacional de Entre Ríos, en Almirante Brown 54. También se pueden comunicar al 3445451533 (Judith Mansilla) o por instagram @lamella.er”, añadieron.

Pensar en otros
En una sociedad que tiende al individualismo, con emoción, los jóvenes relatan: “Todos hemos pasado frío, la diferencia es que algunos tenemos la posibilidad de llegar a nuestras casas y abrigarnos, prender el calefactor y tomar algo caliente. Hay vecinos que no, personas que lo sufren todo el tiempo. Nosotros tenemos la posibilidad de ayudarlo con aquello que ya no usamos, nos queda chico o deseamos aportar. Necesitamos construir y reforzar la empatía, como sociedad debemos construir solidaridad”.
En esta línea, explicaron: “Esta no es una campaña aislada, nosotros construimos cotidianamente en diferentes barrios de la ciudad como Antártida Argentina, La Floresta, 33 Orientales, Illia, Anacleto Medina. Venimos realizando colectas de útiles y alimentos, ya que en esos y más barrios hacemos brigadas educativas, apoyo escolar, encuentros, talleres y festivales para las familias. Son bienvenidos quienes deseen sumarse a construir, a ser parte”.
En el barrio Antártida Argentina, junto a la comisión vecinal y los habitantes de la zona, se propusieron como objetivo reconstruir la plaza donde cada tarde juegan los gurises.
A fines de abril, realizaron un bingo solidario para recaudar fondos: entre tortas fritas y charlas, con donaciones de comercios y de otros paranaenses reunieron lo suficiente para comenzar a pintar algunos juegos. Tienen previsto realizar más actividades, con el objetivo de ayudar y mejorar ese espacio público para el disfrute de los vecinos.

